De por sí, su nombre nos augura que se trata de una especie particular y, para algunas personas, atemorizante. Sin embargo, el Diablo espinoso, además de ser totalmente inofensivo para el ser humano, guarda muchas sorpresas en sus hábitos de vida y características físicas.

Características

El nombre científico del Diablo espinoso es Moloch horridus, aunque popularmente se le conoce con otros nombres como Diablillo espinoso australiano, Móloc hórrido, o simplemente Moloch, palabra la cual es asociada al sacrificio de niños pequeños en piras consumidas por las llamas. Parece ser que este ser mitológico y el lagarto australiano tienen los mismos cuernos. Este lagarto es el único miembro de su género, y las típicas espinas en su cuerpo son uno de los rasgos más distintivos de este animal. No obstante, otras características del Diablo espinoso hacen que sea un animal muy singular.

Su cuerpo presenta una coloración arenosa con pequeñas tonalidades de color marrón. Como la gran mayoría de los lagartos, la coloración del Diablo espinoso se encuentra relacionada con la temperatura de su hábitat, y esto les permite camuflarse con una facilidad impresionante. Como comentábamos anteriormente, y como su nombre lo infiere, el Diablo espinoso posee un cuerpo cubierto de espinas, una cualidad que le permite defenderse de sus depredadores.

Dónde viven

Los diablos espinosos habitan al oeste y el norte del continente australiano. Su preferencia por las altas temperaturas y los suelos arenosos, hace que el hábitat de los Diablos espinosos se componga principalmente por zonas desiertas y áridas, un rasgo que les permite además camuflarse con el entorno y evadir a los depredadores. La mayor concentración de Diablos espinosos en Australia se encuentra en el Gran Desierto Arenoso.

Qué comen

Para comprender de que se alimenta el Diablo espinoso, debemos conocer que son animales carnívoros, con una dieta insectívora. Su apetito voraz y su gran habilidad para la caza le permiten alimentarse con grandes cantidades de comida a diario. La alimentación de los Diablos espinosos se basa principalmente en hormigas debido a su localización, aunque puede ser suplido por grillos.

Generalmente, estos lagartos acostumbran a quedarse inmóviles cerca de una colonia de hormigas, con el objetivo de que estas penetren solas al interior de su boca. Por otra parte, se conoce que los Diablos espinosos se alimentan en el horario de la mañana, o bien, durante el atardecer. Debido a que las hormigas no poseen un gran valor nutricional, los Diablos espinosos deben consumir grandes cantidades de estos insectos, con un promedio de 750 al día.

Cómo nacen

La reproducción del Diablo espinoso es de tipo ovípara, y toma lugar durante los meses de julio y agosto. En este tiempo, los machos suelen ser altamente agresivos, especialmente cuando advierten el olor de la hembra. Se conoce además que los ejemplares del sexo masculino pueden recorrer grandes distancias para encontrar posibilidades de reproducirse. Generalmente, estos lagartos sacuden su cabeza frenéticamente e intentan copular a la hembra, pero esta puede girarse varias veces sobre el suelo si se muestran poco receptivas.

Para saber un poco más sobre cómo se reproduce el Diablo espinoso, debemos añadir que, al final del invierno y comienzos del verano, la hembra copulada depositará sus huevos, aunque algunas observaciones indican que esta especie tiene la capacidad de retener el esperma para ovular más adelante cuando las condiciones sean favorables. Los nidos, generalmente, poseen una profundidad de 22 cm y, en cuanto a los huevos, estos son incubados durante 12 o 17 semanas, tras lo cual emergen las crías con 1.8 gramos de peso y 65 mm aproximadamente de largo.

Comportamiento

Durante la temporada otoñal y, al finalizar el invierno, los Diablos espinosos podrán mostrarse muchos más activos, mientras que, en algunas épocas del año, especialmente en los meses calientes de enero a febrero o, en el invierno de junio a julio, adoptarán un comportamiento sedentario. Normalmente, se refugiarán bajo el suelo.

Por otra parte, se conoce que el Diablo espinoso posee un hábito “seminómada”, condicionado por la disponibilidad de hormigas en su hábitat. En las primeras horas de la mañana, estos lagartos emergen de los arbustos para tomar la luz del sol y, curiosamente, mantienen separado el lugar donde defecan, de aquel donde descansan o hibernan.

Hábitat artificial

Los requerimientos básicos para que pueda vivir una buena vida es, primeramente, consiguiéndole un terrario de buen tamaño para que no esté tan limitado al espacio y pueda tanto moverse como tener lugares donde no se mezclen sus heces y su lugar de dormir, tener un extremo de su terrario a una temperatura alta (45 grados centigrados) y el otro extremo a una temperatura ligeramente fresca, esto para que se pueda mover para regular su temperatura, al igual que añadirle arena para que tenga un ambiente artificial lo más adecuado y apegado posible a los que están acostumbrados estos animalitos.

Curiosidades

  • Si un Diablo espinoso se muestra grisáceo o marrón, significa que la temperatura del entorno es fresca. Del mismo modo, cuando el calor se hace insoportable, el cuerpo de este lagarto se tornará rosa o amarillo.
  • Los Diablos espinosos recolectan el agua del rocío o de la lluvia para calmar su sed. La posición de sus espinas en la espalda crea un canal natural que conduce el agua directamente hacia su boca.
  • A pesar de sus intimidantes espinas, los depredadores más conocidos de este lagarto son las serpientes, las avutardas y los goannas.
  • Otras estrategias de defensa del Diablo espinoso son anclarse al suelo con su cola para evitar ser girados, o bien, inflar su cuerpo para intimidar a sus depredadores.
  • El sistema de camuflaje de estos animales es tan eficaz, que muchas personas lo confunden en la arena con hojas caídas o ramas de árboles.
  • Como mecanismo de defensa, lloran sangre para despistar depredadores además de contener una sustancia nociva para ciertos animales.

Referencias

Follow by Email
Telegram
WhatsApp