Sea cual sea la mascota que tengamos, pasa de ser un simple animal a un miembro de la familia en el momento en el que lo adoptamos o adquirimos. Siempre es grato ya que por lo general pueden estar en paz con la familia y es algo que siempre vamos a recordar, todos los momentos buenos que pasamos con semejante miembro, todas las experiencias, todos los años, siempre van a formar parte de nosotros y vivirán en nuestra memoria como un recuerdo agradable.

Tristemente no todos los animales del planeta pueden gozar de una vida digna; sin embargo, es bueno saber que con el paso del tiempo se van haciendo raros los casos en los cuales sus propios dueños terminan abandonándolos (al menos eso esperamos). Por desgracia no puedo decir lo mismo haciendo referencia al maltrato que los animales pueden llegar a recibir. Por eso es bueno de vez en cuando recordar lo bueno que se ha vivido con estos bellos seres; siempre es bueno poder recordar a alguien que haya estado para nosotros tanto en momentos difíciles como en los no tan difíciles.

Durante este periodo de vísperas de navidad y año nuevo, es importante cuidar de nuestra mascota, fijarnos que no pase frío, si se puede, conseguirle un suéter y/o tenerlo acobijado, no necesariamente algo en los pies como podrían ser unas botas o zapatos, ya depende de cada dueño, sin embargo, hago mención de esto para no llegar a incomodarlo. También es importante no detonar fuegos artificiales ya que podemos lastimar el oído de muchos animales, el cual es considerablemente más sensible que el del humano, por lo que las explosiones de los fuegos artificiales no solo les resultan más perturbadoras, sino que les pueden dañar gravemente su capacidad auditiva, al mismo tiempo que les genera estrés el cual puede traer graves consecuencias a su sistema inmunológico, bajándoles las defensas, haciéndolos propensos a contraer enfermedades, manifestándose esto principalmente con vómitos y diarreas. Al igual que a las aves de la zona, les puede causar taquicardias e incluso la muerte. Una muestra del estrés que les provoca se refleja en que pueden causar el abandono temporal o permanente del lugar donde se encuentran.

Aunque lo más recomendado sea no prender fuegos artificiales, hay quienes no le dan su respectiva importancia a esto y aun así lo realizan, por lo tanto, se aconseja cerrar todas las puertas y ventanas del lugar donde se va a quedar nuestro animalito y cubrirlas con cortinas para que el ambiente sea más seguro. Esto ayudara a amortiguar el ruido y suavizar el impacto de las luces. Otra forma útil para poder calmarlo es haciendo uso de la técnica Tellington Touch, que consiste en vendar estratégicamente algunos puntos del cuerpo del perro para que se sienta más seguro. Para esto se puede utilizar una venda o un trozo de tela.

Este método tiene como objetivo relajar a la mascota y le permite adaptarse a estímulos externos que puedan provocarles algún tipo de estrés.

El procedimiento se detalla como sigue: Colocar la tela a la altura del perro, cruzar los extremos después del cuello en el área de la espalda y luego hacer lo mismo debajo de la espalda. Por último, atar un nudo firme al costado de la columna vertebral. No se recomienda para gatos. Es recomendable colocarlo mínimo 30 minutos antes de que comiencen los molestos ruidos, para que pueda acostumbrarse a ella.

La alimentación, aunque puedan comer ciertos de nuestros alimentos que consumimos en vísperas de navidad, suele no ser tan bueno, ya que les pueden provocar gases o ciertas dificultades el momento de procesar el alimento que hayan ingerido.

Durante las fiestas de fin de año a nuestros amados amigos, en ciertos casos, les cuesta pasarlo tan bien como los humanos, pues además de tener una sensibilidad auditiva mucho más alta que la de los humanos, hay más gente en la casa, entre otro tipo de incomodidades para nuestro amigo peludo. Si bien al participar en actividades de año nuevo y con la familia uno debe de tener consciencia al incluir a nuestro amigo peludo, ya que, aunque para el ser humano pueda ser una experiencia satisfactoria, para nuestro pequeño amigo puede resultar todo lo contrario, causándole cierta incomodidad. Lo más adecuado para nuestro pequeño amigo es dejarlo en un lugar tranquilo, sin muchas personas, y aunque uno quiera involucrarla para que celebre con nosotros de la misma manera que uno lo haría, no siempre es posible y varía dependiendo de nuestra mascota, si ya conoce ciertas personas o si simplemente su personalidad no lo permite.

Por último, nada es para siempre, por lo que disfrutemos de la compañía que nos aportan, del amor que, aunque puede o no ser incondicional, ellos no saben siquiera que existe esa palabra, para ellos siempre va a ser su amor incondicional, que por cierto cabe recalcar que es de los amores más puros que uno puede llegar a experimentar.

¡Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo a todos!

Veterinaria De Pelos

Referencias:

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