La relación que tienen estos felinos con los seres humanos desde hace muchos años se debe a los antiguos egipcios hace 4,000 años. Éstos adoraban a una diosa con figura de gato e incluso momificaban a sus mascotas para su viaje al otro mundo. Posteriormente las civilizaciones adoptaron a los gatos como animales de compañía.
Los gatos domésticos son cazadores natos, capaces de acechar a su presa y atacarla con sus garras y dientes afilados. Tienen una gran visibilidad en la noche por lo que les permiten ver mejor gran parte de sus presas. Son poseedores de un oído agudo. Son ágiles, rápidos y su cola les da un equilibrio fenomenal.
Los gatos suelen ser territoriales, marcan su territorio con sus garras u orina, con esto les dejan saber a los demás el alcance de su territorio. Los gatos domésticos utilizan un repertorio vocal que se extiende desde un ronroneo hasta un chillido.
Estos gatos constan de una dieta carnívora, es por esto que poseen un intestino adecuado para lograr digerir la carne cruda. Su lengua al igual que los demás felinos, es áspera, esto les sirve de apoyo al momento de limpiar lo mejor posible los huesos de animales al igual que le dan su uso al momento de aseo.
A lo que se le conoce como el mito de que los gatos siempre caen parados, es simple y sencillamente un reflejo de enderezamiento, sin embargo, no siempre logran esto con éxito por lo que pueden sufrir heridas que pueden llegar a ser graves.
La edad adecuada para castrar a estos animalitos es pasando la pubertad, el momento en el cual ya son maduros, poseen un tamaño adulto, buena masa muscular e incluso una madurez hormonal y neurológica. Un error grave que se suele cometer en machos es castrarlos cuando aparecen sus testículos (después de 3 meses), sin embargo, es una mala praxis apoyada por algunos “rescatistas” para acelerar su adopción, en hembras se debe tomar en cuenta que es difícil encontrar el útero en gatitas cachorras, siendo ésta una cirugía muy invasiva para un ser tan pequeño. Algunas secuelas desencadenadas por la cirugía a temprana edad serían: crecimiento irregular, infantilismo (la alteración del cuerpo antes de la pubertad), tendencia al sobrepeso, incontinencia urinaria (solo aplica para las hembras y es la perdida de la vejiga), flacidez de masa muscular, debilidad de estructuras articulares y ligamentos. Con base en lo mencionado por la Dra. Liliana Veytia «se considera que al año es muy buen momento para realizar la cirugía, si la esterilización se realiza a esta edad en el caso de hembras, se previene hasta en 98% la aparición de tumor de glándula mamaria tanto en perras como en gatas y en machos se previene la presencia de quistes prostáticos.» Es importante saber que la esterilización no solo es un control natal, sino que sirve para prevenir enfermedades del aparato reproductor ya que muchas de ellas en hembras pueden ser fatales, control de comportamiento, es decir, son gatos que no van a buscar salir mucho de casa y que no van a estar marcando su territorio por lo que su ambiente no olerá tanto a “gato” y ayuda a evitar peleas.
El gato sigue siendo un misterio en cuanto a lo que se refiere a emociones, no son tan notorias como las de un perro; sin embargo, el estrés es un tema importante en los gatos, antes que nada, la alimentación y su hábitat son fundamentales para la salud del gato, son carnívoros estrictos, les gusta explorar, les agradan los lugares donde puedan esconderse al igual que los lugares elevados, duermen mucho pero las pocas horas que están activos deben estar entretenidos, pueden ayudar las pelotas, bolas de estambre, ratones de juguete, colgantes, donde subir o bajar, entre otros. Es necesario que se ejerciten para evitar sobrepeso y mantener su fortaleza muscular. La higiene es básica para mantener su salud, la limpieza de sus areneros no solo evita malos olores, sino que ayuda a prevenir enfermedades genitourinarias; mientras más constante sea su aseo de arenero, mejor, además del estrés causado por no encontrar lugar donde rascar ya que ellos siempre entierran sus evacuaciones.
Suelen medir alrededor de 46 cm de longitud de la cabeza al cuerpo y entre 23-25 cm de altura; la cola suele medir alrededor de 30 cm de largo, sin embargo, ésta puede variar debido a mutaciones o malformaciones entre otras razas como lo pueden ser el Bobtail o el Manx. Los machos son más grandes que las hembras. Generalmente tienen un peso entre 2.5 y 7 kg, sin embargo, esta cualidad varía dependiendo de la raza del gato como lo es un gato ragdoll y el Maine Coon que pueden exceder los 11.3 kg. Existen casos los cuales superan los 23 kg de peso, esto se debe a la sobrealimentación con una errónea dieta.
La esperanza de vida de los gatos domésticos machos ronda entre los doce y catorce años, mientras que las hembras suelen vivir uno o dos años más. El gato más longevo del que se tiene registro es de treinta y ocho años. Tienden a vivir más tiempo si se les restringe la salida al exterior al igual que esterilizarlo (ayuda a prevenir lesiones y heridas al igual que enfermedades tanto del exterior como evitar cáncer testicular o de ovarios, entre otras previamente mencionadas).
Son seres digitígrados (que caminan sobre sus dedos). Las patas delanteras tienen cinco dedos, uno de los cuales no apoya sobre el suelo, y las traseras tienen cuatro dedos.
Gracias a que sus orejas poseen treinta y dos músculos, son capaces de oír direccionalmente al igual que moverlas, puede mover una independientemente de otra. La mayoría poseen orejas rectas y erguidas. Cuando está enojado o con miedo, instintivamente reclinará sus orejas hacia atrás, cubriendo los canales auditivos. Poseen un oído y olfato superior al del ser humano.
Referencias:
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